Indignación con el ministro Catalá por menospreciar el corredor mediterráneo

• Las palabras del responsable de Justicia en el Club de Encuentro Manuel Broseta abre un nuevo frente entre la Generalitat y el Gobierno central

A la hora de ser miembro del Gobierno de España no hay que olvidar que se gestiona un país muy diverso y amplio que va más allá de la meseta. Si eso se tuviera siempre presente, se evitaría problemas como el que generó el pasado lunes el ministro de Justicia, Rafael Catalá, al menospreciar la importancia del Corredor Mediterráneo durante una conferencia en el Club de Encuentro Manuel Broseta.

Catalá durante su intervención se metió él sólo en un problema al asegurar ante un auditorio fruto de una cierta visión centralista del modelo del estado. Sus palabras ante un auditorio claramente cercano a su ideología cuestionando la carencia de infraestructuras generando malestar en toda la costa este española, más de Valencia y Cataluña. Esas palabras fueron: “en materia de infraestructuras, si tuviese tiempo estaría encantado de darle los datos que ponen de manifiesto que la Comunitat Valenciana no tiene una situación de deficiencias en las infraestructuras, ni en los puertos, ni en los aeropuertos ni en las carreteras”.

Ante esta cuestión uno de los asistentes le invitó al ministro a que aclarase su comentario, y Catalá no dudó en hacerlo: “eel corredor mediterráneo también podríamos hablar mucho… ¿Cuántas mercancías salen por tren? ¿Cuántos operadores de mercancías quieren que haya trenes de ancho ibérico y ancho internacional? ¿Están preparados los operadores para operar? ¿Por qué ha habido que hacer ancho mixto para que vayan en ancho ibérico la mayor parte de los vagones porque no están preparados para ello?”.

Y no fue lo único que dijo, en base a los datos actuales del transporte de mercancías, quitó importancia al transporte de mercancías por ferrocarril que en la actualidad con la actual infraestructura sólo lleva el 3%, y aún fue más tajante: “es importante, pero yo creo que ha habido un poquito, un poquito de exageración en cuanto a la importancia estratégica que el corredor mediterráneo de mercancías tiene, utilizando términos cuantitativos y sabiendo quien es el responsable de operar, quien es el responsable de la infraestructura y quien es luego el responsable de operar esa infraestructura”.

Indignación general

Y como no podía ser de otra forma sus palabras, que, por las horas en que se produjeron (pasadas las 22 horas del lunes apenas tuvieron transcendencia en la prensa del lunes), sí las tuvieron en la sociedad valenciana a lo largo del día de ayer. Y el primero en pronunciarse fue el propio president de la Generalitat, Ximo Puig, durante un desayuno informativo en Alicante, donde las calificó como una profunda insensatez» ya que  «para todos los agentes económicos y sociales es fundamental y, desde luego, en estos momentos, lo que está sobredimensionada es la irresponsabilidad del Gobierno de España y de sus palabras».

Puig  aseguró en su discurso que Alicante, y el conjunto de la Comunitat y España, «necesita una apuesta firme por el Corredor Mediterráneo porque va a generar unas economías extraordinariamente positivas para el conjunto de España».

Por ello, según indicó, “me parece más incomprensible que nunca que el ministro Catalá ayer menospreciara en Valencia esta infraestructura diciendo que se habían depositado demasiadas esperanzas en ella», y añadió que «efectivamente, tenemos muchas esperanzas, pero lo que es incomprensible es que se entienda mejor esta cuestión en Europa, en Bruselas, que en el Paseo de la Castellana y eso realmente es lamentable», y ante lo sucedido volvió a reclamar al Gobierno de España “plazos concretos”.

Puig aseguró que el Corredor Mediterráneo «está en una situación de impás», pues, según dijo, «hay un tramo especialmente que es el de Castellón-Valencia, el tercer carril, que hace un año que hubiera tenido que estar finalizado. El problema es una decisión política definitiva, porque no podemos estar permanentemente en una situación de incoherencia del presupuesto», ha considerado.

Para el jefe del Consell «se trata de tener un recorrido del presupuesto más allá de la coyuntura y, en ese sentido, lo que está pidiendo Europa es un compromiso de España». No obstante, ha considerado que hay «buenas noticias más allá de los Pirineos, porque Francia ya ha licitado una parte, Montpelier-Perpinyà, que es muy importante porque en muchos momentos parecía que Francia no iba a tomar el relevo, pero va a ser así».

De igual manera, el secretario autonómico de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio, Josep Vicent Boira, criticó la «miopía» del Gobierno central al «infravalorar» una infraestructura que «es muy importante para las economías valencianas, murcianas, catalanas y andaluzas, pero también para el conjunto de España, porque uniría las regiones con vocación exportadora y los principales puertos de la Península Ibérica».

Boira, que no dudó en replicar al ministro desde su cuenta de twitter (@JosepBoira) a primera hora de la mañana, aseguró que el Corredor Mediterráneo en España “concentraría los cuatro primeros puertos de mercancías de España, dos de los seis más importantes de Europa”, y añadió que. «representa el 70 % de las exportaciones de España y, es más, las principales autonomías exportadoras son la Comunidad Valenciana y Cataluña, en un momento en que las exportaciones son las que mantienen la situación económica del Estado».

También, criticaron las palabras del ministro, el alcalde de Valencia, Joan Ribó, y los portavoces parlamentarios de PSPV y Compromís, Manuel Mata y Fran Ferri, respectivamente. Todos ellos, calificaron las palabras de Rafael Catalá de “insulto” y “ninguneo” a los valencianos, y calificaron de “insólita la visita de un ministro para insultar y menospreciar lo que lleva pidiendo desde hace años una sociedad más de ideologías políticas”, apunto el socialista Mata.

Eco fuera de la Comunitat

Pero las palabras del ministro también tuvieron eco fuera de la Comunitat Valenciana. Así, el  presidente de la CEOE, Juan Rosell, aseguro que es «imprescindible y necesario» el Corredor Mediterráneo ya que ha recordado que el 60% de las exportaciones españolas van a países de la Unión Europea, por lo que ha exigido que «cuanto antes la tengamos mucho mejor».

Rosell ha remarcado que para las comunidades del Mediterráneo el Corredor es «clave» para que los productos lleguen a Europa. Así, ha recordado que esta infraestructura es un «clamor» desde Almería hasta Girona. En su opinión,” la  pregunta es el porqué no se ha hecho antes», e indicar que “este Corredor Mediterráneo hacia Europa es imprescindible y necesario porque el 60% exportaciones españolas van a la Unión Europea, por lo que cuando antes lo tengamos mucho mejor».

Intervención de Fomento

Todas estas declaraciones hicieron que el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, aprovechara una pregunta sobre el Corredor Mediterráneo realizada por el senador de Compromís, Carlos Murlet, para tratar de “corregir” a su compañero de gabinete,  enumerando las inversiones realizadas en ferrocarril.  Según el ministro, el Gobierno destinará en los próximos años unos 775 millones de euros a la mejora de las infraestructuras ferroviarias de la Comunidad Valenciana, de los que 400 millones irán al Corredor Mediterráneo.