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El Consell devolverá de oficio el copago ‘encubierto’ aplicado a los cuidadores no profesionales

  • Les Corts rechazan una propuesta del PP contra la unidad lingüística

La vicepresidenta y consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra, ha anunciado que este departamento devolverá «de oficio» el copago «encubierto» que el anterior Gobierno del PP aplicó a los cuidadores no profesionales de personas dependientes. Esto tendrá lugar, según ha apuntado, cuando esté resuelta la devolución también de oficio de las cantidades correspondientes a la responsabilidad patrimonial «de quienes murieron sin respuesta de los poderes públicos» tras haber solicitado la prestación de la dependencia y a quienes les correspondía dicha prestación.

Así lo ha explicado Oltra durante la sesión de control en Les Corts en respuesta a la pregunta de la diputada socialista Concha Andrés sobre las consecuencias económica y jurídicas de las últimas sentencias del Tribunal Superior de Justicia valenciano contra los decretos y la orden que regulaban el copago del PP.

La vicepresidenta ha señalado que se calcula que el impacto económico sobre las personas afectadas por este copago «confiscatorio», aplicado mediante la citada orden y el decreto, asciende a 122 millones. En relación a esta «ilegalidad», ha comentado que le «encantaría ir al Tribunal de Cuentas y que aquellos gestores que provocaron este agujero tuvieran que hacer frente con su patrimonio personal».

Oltra ha explicado que la Conselleria ya ha puesto en marcha los mecanismos para solucionar la cuestión de la responsabilidad patrimonial. «Cuando eso esté funcionando, este Consell pondra en marcha de oficio la vuelta de las ayudas al cuidador no profesional (CNP). Se trata de un copago encubierto que el antiguo gobierno del PP aplicó durante años de manera injusta e ilegal», ha criticado.

El PP, contra la unidad lingüística

Las Cortes Valencianas han rechazado hoy, con los votos del PSPV, Compromís y Podemos y la abstención de Ciudadanos, una iniciativa del PP sobre el valenciano, que considera distinto y autónomo de «cualquier otra lengua y, en concreto, del catalán».

El diputado del PP Jorge Bellver ha defendido que la propuesta busca «respetar el sentimiento del pueblo valenciano» y su primera seña de identidad, mientras que el resto de grupos han coincidido en acusar al PP de querer reabrir esta batalla para separar a los valencianos, generar conflictos innecesarios y «hacer sangre».

Bellver ha pedido al Consel que cumpla la Constitución, el Estatuto de Autonomía y la Llei d’Us i Ensenyament del valencià y defienda «de forma clara y contundente» ante cualquier administración e institución que el valenciano es un idioma «distinto y autónomo» del catalán.

Compromís y Ciudadanos habían propuesto dos enmiendas para, entre otras cuestiones, eliminar distinción entre ambas lenguas, algo que no ha aceptado el PP al afirmar que esa reivindicación «está sustentada en la voluntad del pueblo» valenciano.

El diputado de Compromís Josep Nadal ha acusado al PP de querer «romper el pacto» impulsado por el propio PP en los 90 para cerrar el conflicto lingüístico, y optar por «una línea dura al estilo Le Pen o Trump», basada en «dividir a la sociedad».

La diputada de Ciudadanos Mercedes Ventura ha afirmado que la iniciativa del PP solo busca «la confrontación entre valencianos», «hacer sangre» y «abrir batallas» para obtener «rédito político y electoral» y ha defendido que este debate corresponde a los filólogos.

La socialista Eva Alcón ha pedido a los populares que retiren la iniciativa, en primer lugar, para «no ponerse en evidencia», y en segundo, porque las Cortes «no es lugar para tratar temas filológicos» y «el valenciano no es un problema». «Los debates filológicos competen a los filólogos, no a las Cortes», ha subrayado.

Sandra Mínguez, diputada de Podemos, ha preguntado si los populares se atreverían a cuestionar estudios e investigaciones sobre matemáticas, y ha considerado que hacerlo con una cuestión filológica demuestra que «la lengua no les importa» y su objetivo es «dividir y, con un poco de suerte, sacar algún voto».

En la tribuna de invitados, uno de ellos ha sacado el cartel Parlem valencià, no català, y ha llamado «traidores a la lengua valenciana», a los parlamentarios que se han manifestado en contra de la proposición de los populares.