Los empresarios escenifican el final de la patronal autonómica
- La CIERVAL desaparecerá a consecuencia de las deudas de la CEC y COEPA
- La CEV asumirá el reto de representatividad del sector empresarial a partir del 3 de marzo
Se cumplirá la hoja de ruta prevista y la antigua patronal autonómica, CIERVAL, integrada por las tres patronales provinciales, pero, sin contacto real con el tejido empresarial valenciano, dejará de existir en breve. Al menos, ese es el trasfondo de la decisión adoptada ayer por el comité ejecutivo de CIERVAL. Éste acordó ayer de forma unánime, presentar «con carácter inmediato» el concurso de acreedores de la organización empresarial en la modalidad de liquidación, si agotar los cuatro meses de plazo del preconcurso.
Con esta decisión, se pone punto y final a 36 años de trayectoria de CIERVAL y se despeja el camino para convertir a la provincial de Valencia, la CEV, para tomar su relevo después de que el 3 de marzo su asamblea apruebe una reforma de estatutos que la convertirá en autonómica.
A esta situación se ha llegado por el problema financiero que arrastra CIERVAL derivado de la gestión de las provinciales de Alicante (COEPA) y Castellón (CEC), que obligó a la autonómica a asumir pérdidas por cuotas que no han pagado o los más de 600.000 euros que le reclama la Generalitat por una deuda derivada de una resolución judicial a raíz de unos cursos de formación que finalmente no llegaron a realizarse, lo que supuso la devolución de las ayudas.
Esta deuda ha sido el detonante final, pues, tanto la CEC como COEPA, han manifestado públicamente no disponer de liquidez para afrontar antes del 27 de febrero las cantidades que la Generalitat reclama a CIERVAL, y únicamente la patronal provincial valenciana (CEV) está en disposición de pagar.
Ello provocó que el pasado mes de diciembre la patronal autonómica presentara preconcurso de acreedores, ya que preveía que, de esta forma, tenía un tiempo de entre tres o cuatro meses para elaborar un nuevo plan de viabilidad que le permitiera adoptar las medidas necesarias para seguir adelante.
En las últimas horas, se ha acelerado el desenlace, según explicaba ayer el propio presidente de CIERVAL, José Vicente González, pues, “no hace falta apurar los plazos porque los plazos se apuran cuando hay cosas que decidir, si no, cuanto antes mejor”.
Sin embargo, las deudas no son el único problema de la patronal autonómica, sino de su legitimidad, según reconocieron distintos empresarios presentes en Cevisama a Mediterráneo Press, “no sabemos que es CIERVAL”. Y no es sorprendente que eso suceda, ya que se trata de una estructura realizada desde arriba sin apenas cimientos. De hecho, muchos de estos empresarios consultados en Cevisama sólo conocían la existencia de la CEV.
Vía libre para la CEV
La decisión adoptada ayer por la ejecutiva de CIERVAL da vía libre a la decisión de la Confederación Empresarial Valenciana (CEV) de asumir su lugar, tal y como anunció hace unas semanas el propio presidente de la CEV, Salvador Navarro.
Dicha conversión, tal y como avanzó Mediterráneo Press, tendrá un momento transcendental el próximo día, 3 de marzo, durante la próxima asamblea general de la CEV en la que se aprobará la modificación de estatutos para asumir la representatividad autonómica.
En este sentido, Navarro ya ha mantenido contactos con empresarios y asociaciones comarcales de Alicante y Castellón para abordar su futura incorporación a la única patronal saneada.