Ábalos asumirá la portavocía socialista hasta el congreso, y luego será secretario de organización
Las asambleas para la elección de delegados inician el camino de la unidad y evitan la confrontación de candidaturas
El nuevo PSOE, que saldrá del próximo congreso federal, tendrá color valenciano. Al menos, eso se desprende de las primeras decisiones adoptadas por el nuevo secretario federal, Pedro Sánchez, que igual que sucedió durante la campaña de primarias confiará su legado a José Luis Ábalos uno de los únicos de su equipo personal se ha mantenido fiel desde el principio, y que ha sido el referente de la campaña en toda España.
Ahora, Ábalos continuará siendo el referente del líder socialista. Primero, durante estos meses hasta la celebración del congreso federal socialista será el portavoz socialista en el Congreso de los Diputados, en sustitución de Antonio Hernández, que dimitió tras conocerse la victoria de Sánchez. Pero, la portavocía del grupo socialista no será su destino final, aunque mantendrá alguna responsabilidad en el grupo, ésta será menor para dedicarse a la vida del partido.
Desde ese momento, según ha averiguado Mediterráneo Press, su responsabilidad será la secretaría federal de organización, es decir, el número dos del PSOE, tras Pedro Sánchez, de manera que por él pasarán todas las decisiones estratégicas del partido, y nada ocurrirá en el seno del socialismo español sin su visto bueno.
Pero, no estará sólo, según ha podido averiguar este diario, José Luis Ábalos, contará con parte de su equipo de los últimos años en sus nuevas responsabilidades en Ferraz, y situará a algunos en alguno de los puestos de la dirección federal.
Nuevo camino
El gesto del pasado lunes del secretario general del PSPV-PSOE, Ximo Puig, le ponerse a disposición del nuevo líder federal parece que no ha sido algo simbólico, y supondrá el inicio de una nueva etapa de concordia y construcción de puentes en el socialismo valenciano. Al menos, eso desprende de los primeros días, y todo apunta que los procesos de elección de delegados al próximo congreso federal que se celebran esta semana, se producirán sin tensiones internas.
Como sucede en las guerras, tras las mismas existe voluntad general de paz, y parece que eso está sucediendo en las asambleas celebradas este miércoles en la ciudad de Valencia, en las que no ha habido conflicto, y donde el sector afín a Ábalos y Sánchez ha dado el hueco proporcional a su representación a los afines a la dirección del PSPV.
Y parece que sucederá lo mismo en las asambleas y congresos previstos para este fin de semana, especialmente, en los congresos provinciales de Valencia y Alicante. Las instrucciones son claras por parte de la nueva dirección: generar espacios de convivencia y no romper el partido en dos. Y así parece que sucederá, salvo en algún lugar concreto, donde el acuerdo no fuera posible.
Pero, este vuelco al clima en el socialismo valenciano, no parecía posible hace apenas 72 horas, cuando los afines a Sánchez querían ir a por todas, y los otros, querían la revancha. Pero, la intervención de Ábalos y de Puig ha cambiado todo, y ha generado el nuevo ambiente, la duda es si llegará hasta el congreso del PSPV previsto inicialmente para finales de julio.
