El Consell lamenta que los tramos entre Castellón y Tarragona y del sur Murcia no tengan ninguna previsión
El Gobierno insiste en que Corredor Mediterráneo estará a finales de 2019, pese a rescindir los contratos de Vandellòs y Castellón y entre Castellbisbal y Vila-seca
La consellera de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio, María José Salvador, ha lamentado entre Castelló y Tarragona y la conexión con la alta velocidad y ancho estándar hacia Barcelona, así como los del sur de Murcia “no tengan ningún tipo previsión”.
Salvador ha participado en Barcelona en la mesa inaugural del IV Encuentro sobre ‘El Corredor Ferroviario del Mediterráneo: Una Asignatura Pendiente’, bajo el nombre ‘El Corredor Ferroviario del Mediterráneo: perspectivas de ejecución’, y en la que también han también han intervenido el secretario de Estado de Infraestructuras, Julio Gómez Pomar, así como el conseller de Territorio y Sostenibilidad de la Generalitat de Catalunya, Josep Rull.
Durante su intervención, ha destacado que el tramo entre Castelló y Tarragona y la conexión con la alta velocidad y ancho estándar hacia Barcelona, “debería haber sido la primera obra en ejecutarse, de acuerdo con el compromiso del ministerio en 2012; sin embargo, el tramo entre Castelló y Tarragona sigue sin plazos, ni tan siquiera hay fecha para empezar las obras. Eso nos muestra un «vacío» de casi 200 kilómetros en el corredor que se agrava con el hecho de que se van a rescindir los contratos que supondrá más retrasos».
De igual manera, la primera de las reivindicaciones de la Generalitat es el Corredor Mediterráneo y acabar las obras de implantación del ancho estándar que permitan el transporte de mercancías entre Murcia, la Comunitat y toda Cataluña con la frontera francesa, así como el de viajeros en alta velocidad. Pero también se debe empezar a trabajar en los tramos al sur de Murcia y en las actuaciones definitivas previstas en el diseño inicial del corredor.
En este sentido, ha destacado los tramos Murcia-Alacant y La Encina-València, donde, en su opinión, «debe haber voluntad política» para llevarlo a cabo y acabar estos tramos en ancho estándar permitiría dar servicio en alta velocidad a más de 3 millones de habitantes que suman el conjunto de tres grandes áreas metropolitanas muy dinámicas, desde Murcia a Castelló.
Según Salvador, el transporte ferroviario de mercancías es un compromiso de todos los estados de la Unión Europea, y por tanto, exige eliminar cuellos de botella y mejorar las conexiones ferroviarias con los puertos, con el fin de atender el tráfico de mercancías, y la alta velocidad para el desplazamiento de viajeros a lo largo del arco mediterráneo.
Compromiso del 2019
Por su parte, el secretario de Estado de Infraestructuras, Julio Gómez-Pomar, ha anunciado que el Ministerio de Fomento «rescindirá y volverá a licitar» los contratos de obra de construcción de los tramos comprendidos entre Vandellòs y Castellón y entre Castellbisbal y Vila-seca al surgir «problemas irresolubles» en los actuales contratos de construcción.
No obstante, Gómez-Pomar ha insistido en que estas nuevas resoluciones de contratos no retrasarán la puesta en marcha definitiva del Corredor Mediterráneo, que ha situado a finales de 2019, ya que «el resto de contratos funcionan con normalidad y no prevemos más cambios», y ha cifrado en 3.123 millones de euros la inversión que se realizará en el Corredor Mediterráneo de 2017 a 2020. Además, ha reafirmado «el compromiso del Gobierno» con la infraestructura mediterránea y ha defendido las inversiones planificadas para los próximos años.