Política

El PP de Alicante cierra su congreso provincial con la elección de su ejecutiva sin grandes novedades

Ciscar mantiene a Dolón como secretario provincial, sitúa a Rafael Candela como coordinador general y al alcalde de Benidorm, Toni Pérez, al frente del comité de listas

El PP de Alicante celebró este sábado su congreso provincial sin ninguna sorpresa, centrado en la elección de su ejecutiva provincial, única  noticia prevista en un proceso sin apenas emoción al no existir ninguna otra candidatura alternativa, y donde el actual presidente provincial, José Ciscar, revalidó su cargo ante la inexistencia de una oposición coordinada y sin apenas novedades estatutarias, pues, asuntos como la limitación de mandatos o la acumulación de cargos continúan sin ser incluidos en sus reglamentos.

Un congreso donde Ciscar reafirmó su control sobre la estructura orgánica del partido,  ante unos mil militantes, y con la presencia del vicesecretario Sectorial y Asuntos Sociales del PP, Javier Maroto, y de la presidenta del Partido Popular de la Comunitat Valenciana, Isabel Bonig. Una estructura que estará dirigida por el ex alcalde Torrevieja, Eduardo Dolón, como secretario provincial, y sitúa al crevillentino, Rafael Candela, como número tres del partido, al frente de un cargo de nueva creación como es el de coordinador general, mientras que el alcalde de Benidorm, Toni Pérez, se sitúa al frente de comité de listas. Por el contrario, el otro gran alcalde del PP en la Comunitat Valenciana, como es el oriolano, Emilio Bascuñana, no tendrá ninguna responsabilidad importante, algo no poco entendido por buena parte de los asistentes al cónclave, que apenas duró mañana.

Junto al secretario provincial y el coordinador se crean hasta seis vicesecretarías. La de Organización que la asumirá el ex alcalde de El Campello, Juan José Berenguer; la de Política Municipal, con la alcaldesa de Almoradí, María Gómez, al frente; la de Comunicación, Juanfran Pérez; la de Transparencia, Juan de Dios Navarro; la de Economía, Carlos Castillo; y la de Política Social, Loreto Cascales. Junto a ellos, se nombran multitud de secretarios de área y otros cargos de segunda fila.

Los discurso apenas tuvieron más contenido que la recuperación del concepto del alicantinismo como resistencia al centralismo valenciano, que realizaron la mayoría de participantes en defensa de la Diputación de Alicante. Esa la línea argumental de los discursos del cónclave, donde José Císcar criticón al Consell de izquierdas, al que ha acusado de querer vaciar de competencias a la Diputación: «Alicante es una gran provincia. Extraordinaria. A quienes se les ha olvidado que vienen a rescatar personas e inventan leyes y decretos para desnaturalizar la provincia les decimos que no van a poder. No van a parar a la provincia de Alicante».

Asimismo, adelantó el rechazo del PP a la futura  ley comarcalización así como a la marcomunidades, que está tramitando en Les Corts, ya que,  «tenemos una división territorial que funciona. No habrá ley de comarcas, mancomunidades ni decretazos que puedan menoscabar nuestra identidad como provincia», y animó a la militancia a realizar una oposición activa, incidiendo en la “defensa de la provincia y de la Diputación de Alicante y también del municipialismo: Vamos a seguir siendo ese equipo sólido y cohesionado que hemos sido hasta ahora».

En este sentido, mostró su apoyo en público al titular de la Diputación, César Sánchez, por su rechazo al decreto de plurilingüismo, y  la supresión cautelar decretada por el TSJCV ante el recurso de la Diputación: «enhorabuena, César. Esta semana los ciudadanos son un poco más libres».

En una línea muy similar se refirió el secretario provincial, Eduardo Dolón, que ha definido a su partido como “el partido de los alicantinos como epicentro de la acción política”, y asegurando que “Alicante necesita partidos que recorran la provincia y antepongan el trabajo al postureo”.

Por su parte, el presidente de la Diputación, César Sánchez, reafirmó a la institución que él preside como “un dique contra la hoja de ruta nacionalista” que diseñan desde la Generalitat Valenciana y el Partido Popular de la Comunitat Valenciana “una oportunidad para devolver la coherencia democrática” a las instituciones autonómicas”, avanzando su intención de continuar oponiéndose a las iniciativas autonómica que vaya contra la marca provincial..