Bonig y Puig, buenas intenciones en materia educativa, pero el Consell “no da marcha atrás”
La líder del PP-CV pide un plan de impulso del valenciano frente a imposiciones, mientras el Consell le acusa de romper la unidad política en defensa de la financiación
Cordiales relaciones, pero, sin posibilidad de acuerdo, ni probabilidad de ello. Así, se puede resumir, la cita política del verano 2017, que duró más de dos horas y media, entre el president de la Generalitat, Ximo Puig , y la presidenta del PP-CV, Isabel Bonig, sin que se alcanzara acuerdo alguno. No hubo acuerdo en materia educativa, en torno al plurilingüismo, ámbito en el que ambos esbozaron buenas intenciones, pero, sin intención de “dar marcha atrás”. Pero, tampoco en materia de financiación, donde desde el Consell se acusa a los populares de· “romper la unidad política” en defensa de una financiación justa.
Sólo dos temas en la agenda de la reunión política del verano, y dos sonoras calabazas, ni la mínima posibilidad de acuerdo se esbozó al terminar el encuentro, y con una diferencia bien clara frente al resto de reuniónes políticas celebradas en el Palau: Puig no compareció ante los medios de comunicación. De esta forma, el ejecutivo marcaba distancias claras con los populares.
A pesar de ello, la dirigente del PP-CV afirmó tener una “relación con el presidente muy buena”, asegurando que “hay que más cosas que nos unen que nos separan”, y achacó las discrepancias “por ser un presidente preso de Compromís y de Podem”. Sin embargo, la impresión dada desde el Consell fue distinta, y se transmitió mucha más distancia. Según el director del Gabinete del President, Arcadi España, el encuentro, que se produce a instancias de los populares, y en el marco de la «voluntad permanente de diálogo» del Consell, en torno a estos dos temas fundamentales para los valencianos, «que tendrían que estar apartados de cualquier tipo de partidismo».
Educación, propósitos sin marcha atrás
A lo largo de toda la comparecencia de prensa no se percibió ninguna posibilidad real de acuerdo, si bien, es cierto que los populares ofrecieron algunas alternativas, éstas no parecían difíciles de aplicar, por no lo decir imposibles, porque supondrían para el Consell tener que dar marcha atrás en sus actuaciones de los últimos dos años, incluso algo más, porque sería reconocer como buena la gestión del PP-CV al volver a ella. Algo en lo que Arcadi España fue contundente: “voluntad de consenso sí, pero no volveremos al modelo de plurilingüismo del PP que no ha funcionado, ni da un tratamiento real a las tres lenguas”.
No obstante, España aseguró que ha incidido en este sentido en que las cuestiones educativas se deben abordar desde el consenso y en el marco «más amplio» de la Ley Integral Valenciana de Educación, que se está negociando con todos los grupos parlamentarios y el conjunto de la sociedad, y ahí el Consell sí está dispuesto a alcanzar acuerdos, pero, no bilaterales, sino más amplios.
Respecto a las decisiones judiciales, ha asegurado en que si, cuando se resuelvan los procesos abiertos, los tribunales dictaminan que hay que hacer alguna modificación en ellas, esta se realizará, porque “estamos por respetar las sentencias”, y anunció que a principios de septiembre el conseller de Educación informara como se aplicará el decreto de plurilingüismo teniendo en cuenta los autos judiciales y la voluntad de los padres.
Desde el PP-CV, Isabel Bonig, aseguró salir “más tranquila”, ya que el jefe del Consell le aseguró “que va a cumplir la sentencia sobre el decreto de plurilingüismo, y eso me alegra aunque no esperaba más», y advirtió que “incumplir sentencias lleva a procesos rupturistas como el catalán”.
Bonig exige a la Generalitat que cumpla la suspensión cautelar del decreto de enseñanza plurilingüe ordenada por el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de la Comunitat Valenciana que le obliga a volver en el curso que empieza en un mes a la doble línea en valenciano y castellano del modelo lingüístico que el PP implantó en 2013.
Propuesta lingüística del PP-CV
Para hacer efectiva esta orden judicial, la lideresa del PP ha propuesto a Puig dos medidas: «La primera, un plan de movilidad del alumnado que atienda a todos los padres que han visto conculcados sus derechos a la hora de elegir la lengua vehicular de enseñanza de sus hijos, tanto en un sentido como otro».
La segunda medida que lanza el PP al Consell es «un plan de refuerzo del valenciano en las zonas castellanohablantes con más profesores, dinero y materiales, para que la lengua no sea un elemento de confrontación sino de unión». Bonig asegura que las familias de la Vega Baja, «no están en contra del valenciano, lo que no quieren es que se les imponga», por eso pide un plan de fomento de valenciano en estas zonas con más recursos docentes y materiales que apele a la voluntariedad de las familias a la hora de aprender la lengua cooficial minoritaria de la Comunitat.
Financiación, ruptura de unidad
Tampoco hubo acuerdo en materia de financiación, donde los populares, a juicio del Consell, “han roto la unidad de acción política al anunciar que no acudirán a la movilización social, convocada por sindicatos y patronal, para reclamar una financiación justa”.
Por su parte, la popular, Isabel Bonig, cree que la manifestación, prevista para principios de octubre, aunque no convocada todavía, «no es necesaria» porque el informe de los expertos autonómicos y del Gobierno central «reconoce» la infrafinanciación en la Comunitat Valenciana. En su opinión, «no se puede llevar la pancarta y votar en contra de los Presupuestos Generales del Estado (PGE)», y pide al resto de partidos que apoyen la partida de 2018 que contemplará la reforma del sistema, según ha indicado.
La popular ha alertado que observa «paralelismos con Cataluña» respecto a esta manifestación, ya que «empezaron con Madrid nos roba, luego con la Educación y ahora tenemos un órdago separatista. No obstante, Bonig ha asegurado que el Consell “cuenta con el apoyo del PP en materia de financiación porque por encima del partido están los valencianos».
Por su parte, el jefe de gabinete del ‘president’, Arcadi España, ha asegurado haber escuchado las «versiones» de Bonig sobre este asunto y cree que hay «más excusas que respuestas» al motivo por el que el PP no participará en la manifestación, y ha afirmado que «no entendemos por qué el PP dice que no, es para defender en Madrid un modelo de financiación justo».
Desde Les Corts los grupos parlamentarios que sustentan al Consell también han criticado al PP-CV. Desde el PSPV consideran que carece de autonomía respecto a Madrid y en Compromís instan a los votantes a desobedecer a la dirección del partido y, si están comprometidos con la financiación, a acudir a la movilización.