Muere la ex ministra socialista Carmen Alborch
Fallece a los 70 años en su domicilio de Valencia tras una larga enfermedad, tras haber sido pionera en la lucha por la igualdad de la mujer
Casi a los 71 años de edad, y tras parecer una larga enfermedad, que nunca le quitó su típica sonrisa, ha fallecido este miércoles la ex ministra de Cultura, Carmen Alborch Bataller, nacida en 1947 en la localidad valenciana de Castelló de Rugat, y afincada en Valencia. Eso sí, a pesar de la enfermedad, siempre a pie de cañón sin bajar los brazos, ni rendirse en esta batalla.
Intelectual, gestora política, profesora de derecho, feminista, avanzada a su tiempo, llegó a ser ministra de Cultura, en el último gobierno socialista de Felipe González, entre julio de 1993 y mayo de 1996. Antes había sido la responsable de poner en marcha el Instituto Valenciano de Arte Moderno (IVAM). A partir de ese momento, nunca abandonaría la política, primero como e diputada socialista por Valencia desde 1996 hasta 2008; senadora desde ese año hasta 2016; y concejal del Ayuntamiento de Valencia entre 2007 y 2011. Quizás la alcaldía de Valencia fue su asignatura pendiente.
Por ello, Carmen Alborch fue distinguida el pasado 9 d’Octubre con una de las altas distinciones de la Generalitat. En su concesión, la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, destacó su «impecable trayectoria» y recordó aspectos que fue la primera decana de la Facultad de Derecho de la Universitat de València y la primera ministra valenciana de Cultura del Gobierno entre 1993 y 1996.
Esta distinción fue la última que recibió, pero no la única. En su carrera figuran numerosas distinciones por su lucha por la igualdad entre mujeres y hombres, como Premio de Mujeres Progresistas, Premio Meridiana de la Junta de Andalucía, Premio Rosa Manzano 2007 o Premio de Gabriela Sánchez Aranda 2009. También, fue socia de honor de la Asociación Clásicas y Modernas y de la Asociación de mujeres investigadoras y tecnólogas (AMIT), y recibió el Premio Generando Arte 2015 concedido por la Asociación Generando Arte de mujeres artistas. Además, le fue concedida la Cruz de Honor de San Raimundo de Peñafort, nombrada Officier Dans L’ordre Des Arts Et Des Lettres y de La Gran Cruz de Carlos III.
Durante su etapa política aprovechó para desarrollar faceta literaria, donde tuvo una dilatada trayectoria desde 1999 cuando editó con Solas, donde reflexionaba sobre las mujeres que deciden vivir sin pareja. A este libro le siguió Malas. Rivalidad y complicidad entre mujeres, que resumía el espíritu de la obra. Esta trilogía se completó con Libres: Ciudadanas del mundo, publicado en 2004. Su trayectoria literaria la completó con la obra La ciudad y la vida, dedicada a Valencia, donde narraba sus experiencias personales y políticas, así como de la muerte de algunos de sus amigos, Manuel Broseta, Ernest Lluch y Francisco Tomás y Valiente, en manos de ETA. Su última obra, publicada en 2014, Los placeres de la edad (2014), era una invitación a disfrutar de la vejez.
Su compromiso en la lucha por la igualdad entre mujeres y hombres definió siempre su trayectoria hasta la muerte. De hecho, en su discurso el pasado 9 d’octubre, defendió que “el feminismo debería ser declarado Patrimonio Inmaterial de la Humanidad”, y abogaba por «construir y luchar por un mundo mejor, una meta, aseguró, por la que trabajaría hasta el último suspiro”. «Lucha» y «esperanza» eran sus palabras de aquel momento, que han estado presentes en toda su vida de lucha por la igualdad de derechos.
Conmoción en España
La noticia de su fallecimiento ha conmocionado a toda España, y las distintas cámaras parlamentarias por donde pasó han guardado un minuto de silencio, tanto el congreso como el senado, la han recordado, así como los responsables de todos los partidos, porque, por encima de las ideas políticas, ha contado con el respeto de toda la clase política, y este jueves Les Corts, también guardarán un minuto de silencio.
Sus restos mortales han sido trasladados pasadas las 18 horas desde su domicilio hasta el Tanatorio Municipal, donde se celebrará el funeral este jueves en la más estricta intimidad. Eso sí, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, el president de la Generalitat, Ximo Puig, y el ex secretario de Organización del PSOE y ex conseller de Cultura, Educación y Ciencia, Ciprià Ciscar, entre otros, han expresado sus condolencias y han recordado su labor.
De igual manera, el Ayuntamiento de Castelló de Rugat (Valencia), localidad natal de la ex ministra, ha decretado tres días de luto por la muerte de su hija predilecta. Según la resolución de la alcaldía de Castelló de Rugat, la trayectoria personal, profesional y política de Alborch «ha hecho a todos los vecinos sentir orgullo de compartir con ella» su origen y «experiencias como pueblo».