Simulacro de los servicios de vigilancia y socorrismo en la playa del Racó de l’Albir
Se pretende comprobar que los protocolos de actuación son los adecuados para hacer frente a una situación de emergencia
El Ayuntamiento de l’Alfàs del Pi, a través de sus concejalías de Playas, Sanidad y Seguridad Ciudadana, ha querido poner a prueba su dispositivo de vigilancia y salvamento en la playa del Racó de l’Albir con la realización de un simulacro en el que se ha podido comprobar la efectividad de sus protocolos de actuación.
El simulacro ha consistido en una intervención desde tierra, con el avistamiento por parte de los socorristas destacados en la playa de una persona con problemas dentro del agua y su posterior rescate. Una vez que la víctima ha sido rescatada, los efectivos sanitarios han comprobado que se encontraba en parada cardiorrespiratoria, por lo que han iniciado las maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP) y su evacuación para dar de esta manera por finalizado el ejercicio.
La concejala de Sanidad y Bienestar Social, Marisa Cortés, se ha acercado hasta la playa de l’Albir para seguir en directo el simulacro, que ha servido para comprobar que los protocolos de actuación son los adecuados para hacer frente a una situación de emergencia. En cualquier caso, los técnicos evaluarán de forma pormenorizada cada pequeño detalle del ejercicio para, si fuera necesario, implementar dichos protocolos.
“Se trata de un ejercicio que se repite cada verano, con el fin de estar prevenidos y preparados ante cualquier situación de emergencia que pudiera darse”, ha explicado Cortés, quien ha seguido el simulacro junto al jefe de la Policía Local, Joaquín Ortiz.
El servicio de salvamento y socorrismo de la playa del Racó de l’Albir cuenta con tres sillas de proximidad que están apoyadas desde el mar por una embarcación de rescate, así como por un puesto de movilidad. Así mismo, la asistencia sanitaria se complementa con un puesto de primeros auxilios en el que se encuentra disponible un equipo humano encabezado por un enfermero. Además, como en años anteriores, la playa del Racó de l’Albir es espacio cardioprotegido gracias al desfibrilador instalado en el puesto de primeros auxilios.