El sector educativo observa en la anulación del acuerdo de plantillas una oportunidad para un pacto educativo valenciano
UGT pide la continuidad del acuerdo pese a la nulidad jurídica, mientras ANPE apuesta por un nuevo acuerdo
Conseguir un gran pacto social educativo valenciano. Esa es la histórica reivindicación de los docentes valencianos tanto a los distintos responsables educativos de los últimos 20 años como a los representantes sindicales, pero nunca ha sido posible. Sin embargo, la decisión del actual equipo gestor de la Conselleria de anular el acuerdo de plantillas ante el informe jurídico de Abogacía de la Generalitat que lo calificaba nula de pleno derecho, ya que el acuerdo no debió firmarse por parte del anterior Consell al estar en funciones abre ahora una gran oportunidad para avanzar hacia ese pacto educativo valenciano.
Así, coincidían este sábado distintos veteranos docentes aún en activo que entendían que lo sucedido jurídicamente debería ser la gran oportunidad para crear ese gran pacto, y ajustar las necesidades de plantilla de los centros educativos, entre ellos, la inclusión del acompañamiento acompañamiento evolutivo y emocional a todo el alumnado de secundaria, bachillerato y ciclos medios por parte de todos los docentes, actividad que sucede en la enseñanza concertada, y que apenas tiene seguimiento en los centros públicos.
Asimismo, según estos docentes, otro de los aspectos a abordar es la no generalización del alumnado, pues, no todos los alumnos y alumnas son iguales, por lo que sería la extensión de los Programas de Diversificación Curricular al primer ciclo de primaria, y no dejarlo únicamente a 3º y 4º de la ESO, pues, permitiría ofrecer una alternativa educativa a esos alumnos disruptivos ofreciéndoles una educación personalizada a sus cualidades en lugar de codocencia, y además, vincular las subvenciones por escolarización a las familias a rendimiento académico y comportamiento, algo que actualmente no sucede.
De igual manera, desde el colectivo del profesorado de secundaria se entiende que las ratios en el primer ciclo de secundaria, que son los cursos equivalente a 7º y 8º de EGB, deberían ser más reducidos similares a los de educación primaria.
Para el profesorado resistente también es necesaria la recuperación de aspectos de autoridad en el aula que actualmente se ha ido perdiendo, y como reconocía un veterano docente, apenas existen armas para mantener la disciplina en las aulas. Aseguran que las acciones de acompañamiento evolutivo y emocional al alumnado suele favorecer el mantenimiento de unas normas de disciplina del mismo.
En este sentido, desde ANPE se apuesta por una línea similar, y se entiende que es necesario llevar a cabo una negociación de unas nuevas órdenes de plantillas que, bajo esa figura legal, otorguen plenas garantías jurídicas a su elaboración y que mejoren la situación actual de los centros educativos públicos en términos de personal docente disponible, dotándoles de estabilidad y eliminando cualquier tipo de incertidumbre entre los docentes.
Por el contrario, los sindicatos UGT, CCOO y STEPV, que promovieron la huelga del pasado jueves, insisten en pedir la continuidad del acuerdo pese a la nulidad jurídica del mismo según Abogacía de la Generalitat.
Así, UGT entiende que «no hay motivos, ni razones técnicas ni presupuestarias que justifiquen la anulación del acuerdo de plantillas». En su opinión, «no es asumible por un gobierno serio y responsable escudarse en razones técnicas y presupuestarias para privar al pueblo y la ciudadanía valenciana, especialmente a su clase obrera y trabajadora, de un derecho fundamental como su derecho a una educación pública, inclusiva, con recursos y de calidad. No existen razones técnicas y presupuestarias que justifiquen la anulación y derogación de los acuerdos de plantillas y si las hubiera, es responsabilidad de un gobierno comprometido con la ciudadanía que lo ha elegido, buscar las soluciones técnicas y presupuestarias necesarias para reactivarlos y ponerlos en funcionamiento».
De esta manera, el sindicato valora «muy negativamente esta reacción desproporcionada y brutal que evidencia cuales son las verdaderas intenciones del gobierno de PPVOX, con su ofensiva neoliberal y ultrareaccionaria: el desmantelamiento de la escuela pública, el maltrato a su profesorado, ninguneando sus reivindicaciones, y a la comunidad educativa, privándole de un servicio público esencial a la ciudadanía valenciana”.
Desde UGT se exige «una escuela pública valenciana inclusiva, con recursos y de calidad, con más y mejores maestros y maestras, profesores y profesoras, y la dotación de nuevos perfiles profesionales en los centros educativos (orientadores/as y educadores/as sociales) como personal de atención socioeducativa complementaria (PASEC) ”.
Desde UGT «hacemos un llamamiento a la sociedad valenciana para que continúe en la movilización, en defensa de la escuela pública valenciana, inclusiva y de calidad”.