Puig saca pecho de su gestión frente a un PP-CV que critica sus “silencios” y un Compromís que acusa a Sánchez y Feijoó de “traidores”

Catalá trata de vincular al jefe del Consell con todos los agujeros del ejecutivo, mientras que desde Compromís cuestiona que PP y PSOE obstaculicen el Derecho Civil Valenciano

Sesión de control multicolor en la que cada formación marcó su agenda política ante las próximas elecciones. Así, el president de la Generalitat, Ximo Puig, ha sacado pecho su gestión, avalada por los indicadores económicos y sociales, frente a un PP-CV que le ha reprochado sus “silencios” ante cuestiones como el caso Azud, la ley de «solo sí es sí» o el incidente del tren de Bejís. Por su parte, la portavoz de Compromís, Papi Robles, no ha dudado en acusar Sánchez y Feijoó de “traidores” por no respaldar la reforma constitucional para la recuperación del Derecho Civil Valenciano.

Puig, que ha respondido a  la pregunta registrada por los populares, ha valorado la mejora de los indicadores económicos y ha asegurado que, a pesar de la pandemia y de la crisis generada por la guerra en Ucrania, “la Comunitat Valenciana está mejor que en 2015”.  En su opinión, el Consell está realizando de los recursos económicos propios y la tramitación para atraer fondos europeos, que ha permitido haber recibido, hasta el momento, 710 millones de euros en ayudas directas para empresas y ayuntamientos, y la licitación de actuaciones por un importe total de 993 millones de euros, tanto por parte de la Generalitat como por parte de Gobierno de España, entre las que se encuentran el canal ferroviario de acceso a Valencia y las obras del Corredor Mediterráneo.

De igual manera, ha destacado el incremento del número de afiliados a la seguridad social que ha pasado de 1.648.368 en 2015 a los actuales 2.041.479, lo que supone un incremento de 393.111 personas afiliadas. Asimismo, ha señalado que la tasa de paro se situaba en el 23% en junio de 2015, frente al 13% actual, y que la tasa de paro juvenil ha pasado del 38,1 % al 24,9%, lo que ha supuesto un descenso de 50.000 parados.

Por su parte, la portavoz  popular, María José Catalá, ha denunciado el silencio «tan manso y doloroso» que mantiene Puig ante asuntos como el caso Oltra, el tren de Bejís, el caso Azud o las consecuencias de la ley de solo sí es sí. Así, ha criticado que “hay medio centenar de contratos con las empresas de los familiares del ex tesorero del PSPV y principal cabecilla de la presunta tramo corrupta AZUD de las administraciones gobernadas por el PSOE”.

Catalá ha explicado que “la alargada sombra de Pepe Cataluña llega a todas las administraciones. Desde el Ayuntamiento de Valencia ha contratado 31 veces con 3 empresas del yerno de Pepe Cataluña. 308.000 euros adjudicados por delegaciones socialistas a unas empresas que usted conoce bien, porque ha contratado 128.000 euros con ellas desde Presidencia y desde Consellerias socialistas. En total, casi medio millón de euros adjudicados al yerno de su ex tesorero. Todos no preguntamos si está comprando el silencio de Cataluña y su entorno”.

Respecto al tren de Bejís ha afirmado que “debe asumir responsabilidades. Catalá ha preguntado a Puig “por qué emergencias ignoró una llamada de emergencia una hora antes, por qué la Guardia Civil dice que se podían haber adelantado e impedir el paso del tren, por qué 40 personas se vieron en esa situación”. También ha preguntado si la consellera Gabriela Bravo se está planteando dimitir por su falta de credibilidad de la gestión de emergencias, como le decía en su día ella a Oltra.

Traición a los valencianos

La síndica del Compromís en Les Corts, Papi Robles, ha acusado a Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo de «traicionar a los valencianos desde hace años» en cuestiones como la reforma de la Constitución para incluir el derecho civil valenciano,  la financiación autonómica o el megaproyecto de renovables del Ministerio en Castelló.

En su intervención en la sesión de control al president, Robles ha asegurado que en Compromís están «cansados de escuchar que no hay acuerdo» entre PP y PSOE, ya que «hay momentos en que sí encuentran», como la reforma de la Constitución para modificar el término «minusválido».

También ha criticado que las visitas de los representantes nacionales de los partidos no se transformen en acuerdos para los valencianos: «Aquí todo el mundo viene a pasear a sus jefes y a invitarlos de fiesta, pero los valencianos no estamos para fiestas», ha aseverado. Por ello, le ha preguntado al president: «¿Cómo ve que se relegue la financiación? ¿Cómo ve que se deje fuera de la reforma el derecho civil valenciano?»

En su respuesta, Puig ha admitido: «¿Que qué me parece? Me parece mal» y ha señalado que el cambio del modelo de financiación es «de justicia», ya que «el principio constitucional se está superando». Así, ha señalado que «el problema real» es que «no hay un consenso básico entre los territorios y sobre todo en el Congreso».

Además, ha defendido que la Generalitat ha sido el único gobierno autonómico que ha planteado una propuesta de reforma constitucional, y ha considerado que debe haberla, ya que la Carta Magna no recoge ni siquiera la realidad autonómica de España.